martes, 28 de septiembre de 2010

Evaluación en el aula

La meta fundamental que debe regir a todo maestro o maestra, institución o sistema educativo es la de procurar que todo sus estudiantes alcancen de manera exitosa los fines propuestos durante el periodo educativo.
Es importante tener en cuenta las capacidades que tienen los estudiantes a la hora de aprender y asimilarlos aunque este proceso no sea homogéneo, de esta manera es importante generar nuevas estrategias de aprendizaje que permitan una mayor comprensión por parte del estudiante.
Debe ser claro que nadie va la escuela con el propósito de no aprender o de perder el año, pero no se puede negar que en los salones de clase hay estudiantes que aprenden de manera desigual, con desarrollos de aprendizaje distintos, disposiciones que deben ser canalizadas por los docentes para potenciar este conocimiento, logrando que todos aprendan y sean competentes cuando se encuentren cumpliendo un papel en la sociedad.



Fundamentación conceptual de la evaluación en el aula: es común en la tradición educativa fraccionar el proceso formativo en, enseñanza, aprendizaje y evaluación como si estas no hicieran  parte de una misma unidad.
Es importante entender que la evaluación en el aula es una es de la actividades que hacen parte y se desarrollan dentro del proceso formativo que se adelanta en la institución escolar, con lo cual no solo aprenden los estudiantes, sino que especialmente lo hacen los maestros, porque a partir de ella es que deben visualizar, organizar y planificar su trabajo de enseñanza.
Los principales rasgos que caracterizan a la evaluación educativa en los niveles de básica y de media, son:
Formativa, motivadora, orientadora, pero no sancionatoria: una evaluación que no forme y de la que no se aprenda es improcedente. Cundo se dice que la evaluación está formando se refiere a lo intelectual y lo humano.
Cuando se refiere a la evaluación se está diciendo que debe ser motivadora y orientadora, es decir que sirva para identificar las fortalezas y debilidades, para que se pueda corregir de manera consciente y participativa.
Al hablar de una evaluación no sancionatoria se busca que no perjudique al estudiante o genere frustración, que puede terminar desestimulando o generar un desencanto por el aprendizaje y la vida escolar.
Utiliza diferentes técnicas de evaluación y triangula información para emitir juicios contextualizados: es importante recordar que los exámenes no son los únicos medios que tiene el docente para evaluar y que estos no son el centro del proceso de aprendizaje.
La evaluación debe realizarse periódicamente durante el proceso de formación y por consiguiente es de vital importancia contar con diferentes maneras de valoración, así se puede evaluar cuando se trabaja en grupo, cuando se habla o discute de un tema particular.
Transparente, continua y procesual: los criterios de evaluación siempre deben ser claros, negociados entre todos, de igual manera al tiempo que se enseña, se evalúa y se aprende porque la evaluación debe ser concebida como un elemento de aprendizaje para todos. Esta da cuenta de los avances y las dificultades que se van dando en el proceso de enseñanza.
Convoca de manera responsable a todas las partes en un sentido democrático y fomenta la autoevaluación en ellas: la evaluación formativa constituye una oportunidad  para los docentes y estudiantes participen en las decisiones que se toman. Esta evaluación les permite a los estudiantes que pongan en práctica la capacidad de argumentar lo que han aprendido de manera crítica y defiendan sus ideas.

1 comentario:

  1. Me parece que es importante tener en cuenta la manera en que se puede evaluar al estudiante y como nos permite mejorar el proceso de aprendizaje de los mismos ya que nos muestra las fortalezas y dificultades que se les plantea, aquí juega un papel decisivo el docente con la decisión que pueda tomar para motivar a sus estudiantes y como se implementan maneras diferentes de evaluar, escuchando las opiniones de los estudiantes para llegar a aguardos.

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